Hoy hice contigo lo que mi padre comigo años atrás. Aquello que tanto me gustaba y que casi había olvidado. Hoy te tomé entre mis brazos y te llevé a la cama mientras viajabas absorta en tus sueños. No pude sujetar este recuerdo que ahora brota envolviendo mi alma.
Chiquitita, espero que me recuerdes cuando arropes a tu hijo. De ese modo le harás heredero de cuantas veces otros lo hicieron.
1º/ Me encanta que me sigas, espero no defraudarte nunca.
ResponderEliminar2º/ Me identifico con tu relato, en el sentido de que acabo de coger a mi nieto, acunándolo para acostarlo.
3º/ En tu foto de seguidora, no hay enlace, te he metido en favoritos, pero he tenido que buscarte y te encontré en Bicefalepena. Saludos.
Precioso. Y cómo te entiendo. Nunca supe que el amor podía ser tan tierno, tan dulce, hasta que nació mi niño.
ResponderEliminarUn abrazo
Que tierno.
ResponderEliminarEs el mejor regalo que nos dan los hijos a los padres...
Un abrazo
Muy bonito. Comunicación pura.
ResponderEliminarUn beso.
A mi también me llena de ternura llevarles dormidos a la cama. Qué bien lo has descrito!
ResponderEliminarUn abrazo de buenas noches
Gracias por pasar por aqui. La verdad es que es bonito no solo vivir cositas con los/as hijos/as sino recordar momentos de nuestra infancia.
ResponderEliminarAbrazos a todos/as!!!
Sencillamente precioso tu escrito, feliz dia ;)
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