Llegué en metro, me calenté la comida en el microondas y me hice un café expreso. Con un sms te dije que me iba de escapada de fin de semana...
Llegué dando un paseo. De camino recogí algunas verduras del cantero. Para comer, un potaje hecho a fuego lento, mimando los alimentos que se van deshaciendo en el caldero. Al terminar la vieja cafetera, con sus vapores, nos avisa de que el café ya está listo. Un barraquito con todo, su limón, su canela, un chorrito de leche y una piedrita de café que mezclo en interminables círculos. La sobremesa se alarga hasta las seis. "No me hacen falta vacaciones", te digo, mientras nos sumergimos de nuevo en la conversación.
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ResponderEliminarBuen plan, vaya que sí.
Salu2.
La pregunta es retórica ¿verdad? jeje ainssssss confieso que yo si necesito vacaciones
ResponderEliminarSaludillos
Maravilloso... difícil elección ¿alguien prefiere el primero?
ResponderEliminarUn abrazo con un toque de garimba del alma ;)
Qué bien están las cosas cuando la cosas están bien...
ResponderEliminarUn abrazo
Me quedo con la segunda, creo que siempre se debe apostar por la buena compañía. Aunque estemos cansados o de mal humor ¿cómo nos sentiríamos entonces si no hubiese nadie para enviar un mensaje?
ResponderEliminarBesos