Me reflejo sobre tí. Mi sombra se proyecta contra tu fría superficie dejando adivinar mi silueta que se mece suave movida por la brisa helada de la mañana.
Soy helecho y ahora vivo tranquilo en una vuelta del camino. Miro todo con la distancia de verme transformado en vegetal, inmóvil de raíz, danzante en la superficie.
Tú, piedra sobre la que me proyecto, eres mi compañera de discusiones silenciosas. Así vivo, feliz por el hecho de ser, hasta que deje de serlo.
El mismísimo instante de ahora mismo.
ResponderEliminarPrecioso
Abrazos
Son esos instantes de belleza que nos brinda la naturaleza. Un besito natural y veeeeerde. ;)
ResponderEliminarMua.